Martingala

En este artículo aprenderás a aplicar el método Martingala casino online para salir triunfante en todas tus apuestas. Lo primero que te contaremos será en qué juegos y tipos de apuestas puedes usarlo a tu favor. Esto es clave porque si lo aplicas en el juego equivocado no obtendrás ningún beneficio. Luego veremos cómo utilizarlo, desarrollando el paso a paso de un ejemplo concreto, para que empieces a ponerlo en práctica cuanto antes. Después veremos la lógica detrás de este famoso método para que entiendas por qué tantas personas suelen utilizarlo. Por último, te contaremos sobre algunas de sus variaciones y resumiremos cómo se aplican para que pruebes cuál de ellas es la que más te gusta o la que más te conviene.

¿En qué juegos puedes aplicar el método Martingala?

El método Martingala está diseñado para juegos en los que tus probabilidades de ganar son del 50% (es decir, “binarias”). Es decir, aquellos que te ofrecen apuestas centradas en dos opciones como blanco/negro o par/impar, y con ello limitan tus posibilidades de perder o ganar a la mitad. Por ejemplo, en este tipo de apuestas, si optaste por el negro la única alternativa para que pierdas es que salga blanco. Por otro lado, si escogiste los pares, la única posibilidad de que pierdas es que queden los impares, y así sucesivamente. Algunos de los juegos de casino que ofrecen este tipo de apuestas son: ruleta, blackjack, bacará y dados, también llamados craps. Pero pon mucha atención, porque no todas las apuestas que se hacen en estos juegos son binarias. Por ejemplo, la ruleta tiene diez tipos de apuestas, divididas en apuestas internas, que se hacen con los números ubicados dentro del recuadro del tapete y apuestas externas que se hacen fuera de la sección de números del tapete. De estas opciones solo tres te ofrecen una probabilidad de triunfo del 50%.

¿Cómo aplicar el método Martingala?

Para explicar cómo aplicar el método Martingala vamos a poner un ejemplo con la ruleta. Como vimos antes, en este juego tienes tres opciones de apuestas binarias. La primera es apostar al color, en cuyo caso puedes escoger el blanco o el negro. La segunda es apostar a los números pares o impares. La tercera, consiste en apostar a los números bajos, es decir, a los que van del 1 al 18 o a los números altos, es decir a los que siguen del 19 al 36. Una vez hayas escogido tu apuesta, necesitas elegir un monto bajo que vas a usar como referencia de ahora en adelante. En caso de ganar, debes seguir apostando el mismo monto a cualquier opción de apuesta binaria, pero en caso de perder, debes doblar tu próxima apuesta. Por ejemplo, si le apostaste $1000 al negro en tu primer juego y ganaste, puedes apostar nuevamente $1000 en el próximo juego a cualquier opción de las que hemos descrito anteriormente. Si por el contrario, perdiste, en el próximo juego debes apostarle $2000 al negro. Si vuelves a perder, esta vez tendrás que apostarle $4000 también al negro. Si perdieras 6 veces seguidas, las sumas de dinero que tendrías que apostar en cada turno serían $1000, $2000, $4000, $8000, $16.000 y $32.000. Por este motivo el monto que decidas apostar inicialmente no debe ser muy alto.

La lógica detrás del método Martingala

La lógica detrás de este método es muy sencilla. En primer lugar estas escogiendo un tipo de apuesta binaria con la que ya sabes que tienes solo dos resultados posibles. Esto te asegura el triunfo en un 50%. Por otro lado, al doblar tu próxima apuesta, después de haber perdido, estás aumentando las probabilidades de recuperar tu dinero y de ganar. Por ejemplo, supongamos que empiezas jugando con $10.000 y en tu primera ronda perdiste $1.000 apostándole al negro. En este punto te quedan $9.000. Ahora, en tu segunda ronda apuestas $2000 nuevamente al negro y ganas $2000 lo que te suma un total de $11.000. Esto significa que has recuperado lo que perdiste ($1000) y también has ganado ($1000). Por último, a medida que avanzas con la misma apuesta hay cada vez menos probabilidades de que salga nuevamente el resultado que te hizo perder. Es decir, si le apostaste al negro, salió blanco y aplicas el método de continuar apostándole al negro en los próximos juegos. ¿Cuántas veces más crees que puede volver a salir blanco? No puede salir blanco infinitamente. La clave está en asegurarse de tener suficiente dinero para continuar con la estrategia. De esta forma, en caso de fallar varias veces seguidas, podrás continuar jugando hasta que recuperes tu dinero y ganes.

Variaciones del método Martingala

Si el método Martingala te ha resultado interesante quizás quieras conocer algunas de sus variaciones. En primer lugar, puedes considerar el “Martingala a la inversa”. Como su nombre indica, este método consiste en hacer lo contrario del método original. Es decir, que en vez de doblar la apuesta cuando pierdas, tendrás que doblarla únicamente cuando ganes. En cambio, en caso de perder, debes mantenerte en la suma inicial que decidiste apostar. La razón para hacerlo de esta forma es que en caso de tener una serie de aciertos, obtendrás una excelente ganancia. Mientras, al perder varias veces seguidas, manteniéndote en un monto mínimo de apuesta, no arriesgarías tanto dinero. En segundo lugar, puedes considerar el “Gran Martingala” una variación que propone triplicar la apuesta cuando pierdes. De esta forma, si tu apuesta inicial es de $1000 y pierdes, en vez de apostar $2000 en la siguiente ronda, tendrás que apostar $3000. Las cifras que tendrías que asegurar para una serie de 6 apuestas perdidas serían entonces $1000, $3000, $9000, $27.000, $81.000, $243.000.